Rehabilitación de calles en Torrelaguna, Madrid.

Cliente: Área Dirección Gral. de Arquitectura y Vivienda. Consejería de Obras Públicas, Urbanismo y Transportes.

Proyecto: Noviembre 1999

Rehabiliatción de las calles Yedra, Redondilla, Almendro, Santísima Trinidad, Hospital y plaza de la Paz.

Desde el punto de vista urbanístico, el proyecto pretende renovar completamente las calzadas y aceras con un nuevo pavimento de adoquín de granito formando grandes superficies enmarcadas por bandas de piedra caliza.

En la Plaza de la Paz se han diferenciado dos áreas, una que da continuidad a la calle de acceso, manteniendo las mismas terminaciones y que contempla  un eventual tráfico rodado con una serie de espacios de aparcamientos, y otra que es la antesala de la Casa de Cultura,  para lo que se han colocado bancos, farolas y se ha sustituido el pavimento de adoquín de granito por losas de granito de 60x60 cm, dotándolo de un carácter distinto.

En esta plaza se tiene por un lado  que resolver el desnivel con la calle Santísima Trinidad y por otro ordenar el generoso espacio de entrada de la Casa de la Cultura. El espacio se ha ordenado con un eje central de circulación y en sus laterales uno de reposo con bancos y otro, junto a la Casa de Cultura, con una superficie vegetal que rompe la “dureza” de tanto pavimento de piedra. Al final del eje central se ha diseñado una escalera que termina en una plataforma que da acceso al zaguán de la casa de Cultura. Junto a la escalera hay una rampa con la que de igual modo, se salva el desnivel. Escalera y rampa se encuadran dentro de un juego de muros de piedra, que además ponen orden a las distintas geometrías que se encuentran en este punto.

En toda la actuación no existe el concepto diferenciador de calzada y acera. Existirá una única cota para circular, tanto a pie como en coche, pues se está actuando en el casco antiguo del pueblo, donde las calles son lo suficientemente estrechas como para no poder trazar dicha separación. Coches y personas se mueven y se cruzan con la consabida dificultad por calles angostas, estrechas y de trazo discontinuo. En las calles con acera se mantendrá la cota de las mismas, de forma que el acceso a las viviendas siga realizándose como hasta ahora, elevándose la cota de la calzada. En las calles sin acera se mantendrá la cota de la calzada junto al acceso a las viviendas, modificando el pavimento, de forma que no superemos pendientes transversales >3%.