Proyecto y Ejecución: 2000
Un tabique de vidrio translúcido divide claramente la zona de día de la zona de noche. El salón y la cocina se aproximan a la luz que entra por los balcones y a la vida de la calle. El dormitorio, vestidor y cuarto de baño se recogen al fondo de la vivienda, reciben luz del patio, y se alejan del ruido...
En ambos extremos del eje de circulación se colocan sendos objetos singulares: en el salón la nevera naranja que ayuda a integrar este espacio con la cocina; en el vestidor, un lavabo apoyado sobre un mueble de iroco que destaca en el conjunto, tras el cual se coloca un gran espejo que duplica artificialmente y en escorzo la profundidad de la casa...
El cuarto de baño es de muy reducidas dimensiones. Para disimularlo, se saca el lavabo al vestidor y se esconde el plato de ducha bajo el pavimento, elevado un escalón. Dos pequeños sanitarios de igual forma, tres nichos para apoyar los utensilios de baño, y el brazo de la ducha, son los únicos elementos visibles en tan pequeño espacio...
El piso es un contenedor muy neutro, de blancas paredes y suelo continuo de tarima de roble tabla ancha. El color y las diferentes texturas los introducen los objetos y el mobiliario...
El piso, orientado a sur, recibe abundante luz. Ésta se tamiza mediante estores y contraventanas de madera maciza al interior...”
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